La llamada del Señor —la vocación— se presenta siempre así: “si alguno quiere venir detrás de Mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame”.
Texto
La llamada del Señor —la vocación— se presenta siempre así: “si alguno quiere venir detrás de Mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame”.
¿TE GUSTÓ NUESTRA MEDITACIÓN?
¡Compártelo!
¿TE GUSTARÍA RECIBIR NUESTRAS MEDITACIONES?
¡Suscríbete a nuestros canales!
¿QUÉ OPINAS SOBRE LA MEDITACIÓN?
Déjanos un comentario!